Lesiones en verano, ¿Cómo evitarlas?

En nuestro anterior post te contamos cuáles son las lesiones más frecuentes en verano pero, ¿Cómo prevenirlas? 

Si quieres superar tus vacaciones sano y salvo, ¡Aquí tienes unas pequeñas recomendaciones para cuidar tu salud física y evitar lesiones en verano!

Ejercicio

Al igual que ocurre con la «operación bikini», es importante ser constantes durante todo el año. Sí, en verano incrementamos nuestra actividad física. El buen tiempo, la duración de los días, el sol y, por qué no, el querer vernos mejor, son factores que influyen en nuestra predisposición para hacer ejercicio. 

Pero debemos tener cuidado. Si durante el resto del año nos limitamos a trabajar todo el día en la oficina e ir a caminar 20 minutos, no podemos pretender echar 3 horas en el gimnasio. 

Por ello, si no practicas deporte habitualmente, debes tener cuidado con la duración y la intensidad. Además, tampoco realices deportes para los que no estás entrenado o a los que no estás acostumbrado, ya que pueden derivar en lesiones más o menos graves en los músculos o  ligamentos. En concreto, evita los deportes de alto impacto.

Calentamiento

Sea cual sea la actividad que vas a realizar, un buen calentamiento y unos estiramientos adecuados son uno de los pilares fundamentales para evitar una lesión. 

Por ello, asegúrate de calentar lo suficiente previamente para no forzar tus músculos y articulaciones, y dedícale unos minutos a realizar una tabla de estiramientos al acabar.

Calzado

El calzado también es un factor que debemos de tener muy presente siempre. Si salimos a caminar, a andar en bici o vamos al gimnasio, debemos asegurarnos de que contamos con un buen calzado

La elección de unos zapatos de deporte apropiados es fundamental para evitar lesiones como la fascitis plantar, por ejemplo.

Además, tanto en la playa como en la montaña, hay que tener especial cuidado con el terreno por el que nos movemos.

Precisamente por eso, trata de usar las chanclas sólo cuando sea necesario y evita utilizarlas para caminar o hacer deporte. 

Este tipo de calzado no sujeta firmemente el pie, ya que apenas sujeta la parte delantera, por lo que es mucho más fácil que tengamos un esguince por un resbalón o una lesión por mala pisada.

Deportes y actividades acuáticas

Como mencionábamos antes, tanto en ríos, piscinas o playas, asegúrate de conocer primeramente muy bien el terreno. Si eres de los que les gusta zambullirse, comprueba que existe la profundidad suficiente. 

Sí, seguro que ya lo has leído antes y estarás pensando que es obvio, pero en España el 5% de las lesiones musculares son causadas por zambullirse sin tomar precauciones previamente.

En caso de que no conozcas el lugar, evita este tipo de saltos, ya que pueden derivar en lesiones graves o muy graves, como la fractura de alguna vértebra.

Viajes

En el otro extremo se encuentran los viajes en coche y en avión. A pesar de que permanecemos en reposo, en trayectos largos pueden derivar en la aparición de lesiones. 

Para prevenirlas, es muy importante procurar variar la postura a lo largo del viaje e hidratarse

Esto es aplicable tanto en los viajes en coche como en avión. En estos últimos, es recomendable moverse, ya sea caminando por los pasillos o haciendo estiramientos en el asiento. De lo contrario, podrían crearse trombos.

Además, en las personas con varices o mala circulación es recomendable el uso de medias de comprensión. 

Consejos para evitar las lesioens en verano